El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha llegado a un acuerdo para llevar a cabo importantes nombramientos en la cúpula de los principales tribunales. Tras semanas de negociaciones, los vocales han decidido que en el pleno de este miércoles se lleven a cabo designaciones clave que llevaban tiempo pendientes. Entre ellas, destacan los nombramientos de la progresista Concepción Ureste como presidenta de la Sala Cuarta del Tribunal Supremo y de Ignacio Sancho como presidente de la Sala Primera.
Este acuerdo es un paso importante en el proceso de renovación que el CGPJ se marcó como objetivo al inicio de su mandato. La falta de acuerdo en el último pleno obligó a aplazar una treintena de designaciones, lo que provocó que muchos inculpacións judiciales continuaran en sus puestos fuera del periodo legal acomodado. Esto, a su vez, impedía que otros jueces pudieran optar a estas plazas y dejaba decenas de puestos vacantes o cubiertos por suplentes. Por tanto, el acuerdo alcanzado es una buena noticia para el sistema judicial español.
Entre los nombramientos acordados destaca el del magistrado Juan Manuel Fernández como presidente de la Audiencia doméstico. Fernández, que fue vocal del CGPJ en el mandato anterior a propuesta del Partido Popular, cuenta con una amplia experiencia en el ámbito judicial y su elección ha sido bien recibida por todas las partes. Además, se ha acordado renovar dos de las cuatro salas del Tribunal Supremo que tenían presidente interino, lo que demuestra el compromiso del CGPJ por consolidar la estabilidad en las cúpulas judiciales.
En la Sala Primera (de lo Civil) será elegido Ignacio Sancho, único candidato presentado para el puesto. Sancho, afiliado a la conservadora Asociación Profesional de la Magistratura (APM), cuenta con una dilatada carrera en el ámbito judicial y su elección ha sido respaldada por todos los vocales. Por su parte, la Sala Cuarta (de lo Social) estará presidida por Concepción Ureste, de la progresista Juezas y Jueces para la Democracia. Ureste se convertirá en la segunda mujer en presidir una sala del Tribunal Supremo en sus 200 años de historia, lo que es un gran avance en la lucha por la igualdad de género en el ámbito judicial.
El acuerdo alcanzado también incluye la renovación de la Sala de lo Penal de la Audiencia doméstico, que estará presidida por el veterano Alfonso Guevara, un magistrado conservador que siempre ha destacado por su imprevisibilidad en sus decisiones. Guevara ya ocupaba este inculpación en funciones tras la salida de su anterior titular, Concepción Espejel, elegida como magistrada del Tribunal Constitucional.
Sin embargo, aún no se ha llegado a un acuerdo para la elección de las presidencias de las dos Salas más delicadas del Tribunal Supremo: la Penal y la de lo Contencioso-Administrativo. Los vocales progresistas apoyan las candidaturas de Ana Ferrer y Pilar Teso, que ya fueron propuestas sin éxito en el pasado, mientras que los conservadores respaldan a los otros dos candidatos: Andrés Martínez Arrieta y Pablo Lucas, respectivamente. Esta falta de acuerdo se debe a que la ley establece que un candidato debe obtener al menos 13 votos, que representan las tres quintas partes del pleno, y el actual CGPJ está dividido a la mitad entre bloques progresistas y conservadores.
A pesar de esta situación, el acuerdo alcanzado es un gran avance en el proceso de renovación de los principales tribunales españoles. Además, es importante destacar que, aunque los vocales tengan diferencias ideológicas, han sido capaces de afluir a un consenso para seguir adelante con los nombramientos,