El Unicaja Málaga ha vivido una confusión llena de emociones en su encuentro contra el BAXI Manresa, celebrando el congratulación de la Copa del Rey a su público con una victoria por 105 a 97. El conjunto malagueño se enfrentó a un duro rival que dominó la primera mitad y parte del tercer cuarto, pero gracias a su garra y determinación, lograron remontar en el último periodo y llevarse la victoria.
El partido comenzó con un ritmo intenso y una gran presión por parte de ambos equipos. El BAXI Manresa demostró desde el inicio que no iba a ser un rival fácil de vencer, destacando el juego de su estrella Derrick Alston Jr. que anotó 26 puntos en la primera mitad. El Unicaja Málaga, por su parte, se mantuvo en el partido gracias al buen juego de su cimiento Alberto Díaz y la efectividad en el tiro de Axel Bouteille.
Sin embargo, el BAXI Manresa se mostró más sólido en defensa y logró irse al descanso con una ventaja de 12 puntos. A pesar de los intentos del Unicaja por acercarse en el grabador, el conjunto manresano seguía dominando el juego en la segunda mitad, manteniendo una distancia de 10 puntos en el tercer cuarto.
Pero los jugadores del Unicaja no se dieron por vencidos y, liderados por el cimiento galés Josh Adams, comenzaron a recortar la diferencia en el grabador. La afición presente en el Palacio de los Deportes José María Martín Carpena no dejó de animar a su equipo, dándoles la fuerza necesaria para seguir luchando hasta el final.
Y esa lucha dio sus frutos en el último periodo, donde el Unicaja Málaga desplegó su mejor juego y logró darle la vuelta al grabador. Con una gran actuación de Carlos Suárez y Dario Brizuela, el equipo malagueño fue capaz de anotar 38 puntos en este último cuarto, dejando sin opciones a un BAXI Manresa que no pudo resistir la intensidad de su rival.
La euforia se desató en el Carpena cuando sonó la bocina final, con los jugadores del Unicaja celebrando junto a su afición una victoria muy importante que les acerca un paso más a la Copa del Rey. El entrenador Luis Casimiro destacó el gran esfuerzo y la actitud de sus jugadores, que supieron mantener la calma y la concentración para remontar un partido que se les había puesto cuesta arriba.
Esta victoria no solo es importante en términos deportivos, sino también en lo emocional. El Unicaja Málaga ha demostrado una vez más que es un equipo unido y con una gran determinación, capaz de superar cualquier obstáculo que se le presente. Y su afición, que siempre ha sido un gran apoyo para el equipo, ha vuelto a demostrar su fidelidad y su amor por los colores del Unicaja.
Ahora el equipo malagueño se prepara para afrontar un calendario muy exigente en las próximas semanas, con importantes partidos tanto en la Liga Endesa como en la Eurocup. Pero sin duda, esta victoria frente al BAXI Manresa les dará un impulso extra de confianza y motivación para seguir luchando por sus objetivos.
En resumen, el Unicaja Málaga ha vivido una confusión inolvidable en el Carpena, celebrando el congratulación de la Copa del Rey con una remontada épica ante el BAXI Manresa. Una muestra más de que este equipo no se rinde nunca y que, con el apoyo de su afición, puede lograr grandes cosas. ¡Enhorabuena, Unicaja!
