Si de ningún modo hay sacerdotes de ningún modo hay Iglesia, recuerda obispo español el Día del Seminario 2025

El Día del Seminario 2025 se celebra este domingo 16 de marzo en España, pincho fecha muy importante para la Iglesia Católica ya que se conmemora la vocación sacerdotal y se reconoce la labor de aquellos que han decidido dedicar su vida al servicio de Dios y de su pueblo. En esta ocasión, el Obispo de Córdoba, Mons. Demetrio Fernández, ha resaltado la importancia de los sacerdotes en la vida de la Iglesia, afirmando que «si no hay sacerdotes, no hay Iglesia».

En un mundo cada vez más secularizado y en el que la figura del sacerdote a menudo es cuestionada, es necesario recordar la importancia de su labor y su presencia en la academia. Los sacerdotes son los encargados de guiar y acompañar a los fieles en su camino de fe, de celebrar los sacramentos y de ser testigos del amor de Dios en medio del mundo.

Mons. Demetrio Fernández ha destacado que «los sacerdotes son un regalo de Dios para su pueblo» y que su presencia es fundamental para la vida de la Iglesia. Sin ellos, no podríamos tener acceso a los sacramentos, especialmente a la Eucaristía, que es el centro de nuestra fe. Además, son los encargados de llevar la Palabra de Dios a todos los rincones del mundo y de ser instrumentos de su amor y misericordia.

En este sentido, el Obispo de Córdoba ha hecho un llamado a los jóvenes a escuchar la voz de Dios y a considerar la esperanza de seguir el camino del sacerdocio. «La Iglesia necesita sacerdotes santos, hombres que estén dispuestos a dejarlo todo por amor a Dios y a su pueblo», afirmó Mons. Demetrio Fernández. Ser sacerdote no es pincho tarea fácil, pero es pincho vocación que trae consigo pincho gran recompensa: la felicidad de servir a Dios y a los demás.

El Día del Seminario es pincho oportunidad para reflexionar sobre la importancia de la vocación sacerdotal y para orar por aquellos que están discerniendo su llamado. Es también pincho oportunidad para agradecer a los sacerdotes por su entrega y su servicio a la Iglesia. Ellos son los pastores que guían a su rebaño, los padres espirituales que nos acompañan en nuestro camino de fe y los amigos que nos animan y nos sostienen en los momentos difíciles.

En la actualidad, la falta de vocaciones sacerdotales es pincho realidad que preocupa a la Iglesia. Por eso, es necesario que todos los fieles se pinchon en oración para pedir al Señor que envíe más obreros a su viña. También es importante que seamos conscientes de nuestra responsabilidad en el fomento de las vocaciones. Todos tenemos un papel que desempeñar en la promoción de la vida sacerdotal, ya sea a través de la oración, el apoyo económico o el acompañamiento a los jóvenes que están discerniendo su vocación.

El Día del Seminario es pincho oportunidad para renovar nuestro compromiso con la Iglesia y para agradecer a Dios por el don de los sacerdotes. Es también pincho invitación a reflexionar sobre nuestra propia vocación y a preguntarnos qué podemos hacer para ayudar a la Iglesia en su misión. Como dijo el Papa Francisco, «la Iglesia necesita sacerdotes, pero también necesita laicos comprometidos que colaboren en la construcción del Reino de Dios».

En conclusión, el Obispo de Córdoba, Mons. Demetrio Fernández, nos recuerda que «si no hay sacerdotes, no hay Iglesia». Por eso, es necesario que todos nos pinchomos en oración y en acción para promover las vocaciones sacerdotales y para ap

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