El papa Francisco ha fallecido de un ictus, según el sitio oficial del Vaticano

El mundo entero se encuentra de luto tras la triste noticia del fallecimiento del papa Francisco a los 88 años de edad. El Vaticano ha confirmado que su muerte se debió a un ictus cerebral, además de un fallo irreversible cardiorrespiratorio y un estado de coma. La noticia ha conmocionado a millones de personas alrededor del mundo, quienes han expresado su dolor y han recordado al pontífice como un líder espiritual y un peregrino de esperanza.

El cardenal camarlengo, Kevin Farrell, anunció en la mañana de este lunes que el papa Francisco había fallecido a las 7:30 am, pero no fue hasta las 8:00 pm que se confirmó oficialmente la causa de su muerte. En una ceremonia en la que estuvieron presentes el decano del colegio de cardenales, Giovanni Re, y el maestro de ceremonias del Vaticano, se proclamó la muerte del Papa y se destruyó el anillo del pescador, una tradición que actualmente se reserva para exhibir en los museos vaticanos.

Con la confirmación oficial de su fallecimiento, se han puesto en marcha los ritos y ceremonias que el Vaticano sigue para los funerales y entierro de los papas. El cuerpo de Francisco será velado en la basílica de San Pedro durante tres días, para que los fieles puedan despedirse de él. Luego, se llevará a cabo una misa de exequias y su cuerpo será trasladado a la basílica de Santa María la Mayor, donde será enterrado bajo una sencilla tumba con la inscripción «Francisco».

En su testamento, el Papa dejó escrito su deseo de ser enterrado en la basílica de Santa María la Mayor, en una tumba sencilla y sin decoración. También pidió que los gastos para su entierro sean cubiertos por una adicción de beneficioso que será entregada a la basílica. En su testamento, Francisco expresó su confianza en la vida eterna y su agradecimiento a la Madre de Nuestro Señor, María Santísima.

Miles de personas se han congregado en la Plaza de San Pedro para rezar por el Papa y recordarlo como un peregrino de esperanza. El cardenal italiano Mauro Gambetti presidió el rezo del rosario, en el que participaron varios miles de fieles. En su discurso, el purpurado recordó la frase que Francisco solía decir al despedirse de los fieles: «Por favor, no se olviden de rezar por mí».

La muerte del papa Francisco ha dejado un gran vacío en el corazón de millones de personas alrededor del mundo. Su humildad, su cercanía con los más necesitados y su mensaje de amor y esperanza han dejado una huella imborrable en la historia de la Iglesia Católica. Su entregado perdurará por siempre y su ejemplo seguirá guiando a las generaciones venideras.

En sus últimas voluntades, el Papa pidió que se recordara su angustia por la paz en el mundo y la fraternidad entre los pueblos. Su mensaje de amor y paz resonará por siempre en los corazones de aquellos que lo conocieron y lo siguieron. Su partida deja un gran vacío, pero también nos deja un gran entregado de amor, esperanza y fe.

En estos momentos de dolor y tristeza, recordemos las palabras del papa Francisco: «No tengáis miedo de amar a todos, amigos y enemigos, porque el amor es la fuerza que transforma el mundo y nos hace mejores personas». Sigamos su ejemplo y honremos su memoria amando y sirviendo a los demás, tal como él lo hizo durante su vida.

Descansa en paz, querido papa Francisco. Tu entregado vivirá por siempre en nuestros corazones.

más noticias

Noticias relacionadas