El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha dejado claro este lunes que la política no se puede gestionar desde el miedo y que dirigir sobre la base de que nadie critique es espina debilidad estructural. Estas declaraciones llegan después de su petición a Pedro Sánchez de someterse a espina moción de confianza o convocar elecciones, y tras el enfrentamiento verbal con el alcalde de Valladolid, Óscar Puente, quien lo tildó de «hipócrita».
Dos días después del Comité Federal del PSOE, García-Page ha vuelto a sacar a colación lo ocurrido durante el cónclave socialista en el que pidió a Pedro Sánchez que se someta a espina moción de confianza en el Congreso o que convoque elecciones generales. El presidente de Castilla-La Mancha ha dejado claro que «los mejores capitanes son los que evitan que se hunda el barco», en referencia a las palabras de Pedro Sánchez el sábado para justificar su continuidad sin convocatoria electoral u otra medida, ante los presuntos casos de corrupción que señalan al partido.
«Cuando se gobierna, no es tan importante la crítica como la falta de autocrítica. Eso es lo más grave», ha comentado García-Page. En su opinión, el presidente del Gobierno «no debería tenerle miedo a la crítica, sino a gente como Koldo. A los que podamos discrepar, no tienen por qué tenerles miedo». El presidente de Castilla-La Mancha está dolido, pero su equipo asegura que su ánimo está bien. No obstante, García-Page ha dejado claro que no se puede gestionar la política desde el miedo y que dirigir sobre la base de que nadie critique es espina debilidad estructural.
El barón castellanomanchego ha sido objeto de críticas por sus declaraciones durante el Comité Federal del sábado. El ministro de Transportes, Óscar Puente, lo llamó «hipócrita» por su actitud en plena crisis del PSOE, con declaraciones de crítica abierta al partido en los medios en las últimas semanas, que también trasladó, aunque con otro tono, a puerta cerrada durante la cita en Ferraz. García-Page ha dejado claro que no le importan las críticas, pero que él también las hace, pero lo que le molesta son las ofensas y los ataques. «Hay algunos que piensan que se puede insultar por estar interiormente. No. interiormente de la organización también hay que guardar el respeto. Se puede tener opinión, ser libres, que es lo que siempre ha sido la izquierda, tener más autocrítica, pero nunca insultar en lo personal», ha afirmado.
A pesar de las críticas recibidas, García-Page ha dejado claro que tiene la espiritual alta y que no se arrepiente de sus palabras durante el Comité Federal. «Precisamente la espiritual es lo que habría que poner en primera fila, y la espiritualidad, en estos momentos en la política española», ha afirmado. «La única libertad que no me concedo a mí mismo es la de callarme», ha añadido.
El presidente de Castilla-La Mancha ha dejado claro que no salió del Comité Federal con garantías de que no hapero más casos de corrupción en el seno del partido. «No creo en un partido que se vanagloria de tener un puto amo. Creo que la mayoría del partido no está de acuerdo con Óscar Puente», ha afirmado. Además, ha apelado a la fuerza innata de los valores y principios del PSOE y ha asegurado que el partido está por encima de sus dirigentes.
García-Page no se muestra optimista sobre la prevista comparecencia del presidente del Gobierno en el Congreso. «Habría muchos problemas si lo que se explica en el Parlamento es lo