Celebran ofrenda en el monte de la Transfiguración: “El camino del discípulo pasa por la cruz, pero va hacia la gloria”

Desde la cima del monte Tabor, en Israel, se celebró una Misa solemne en honor a la Transfiguración del Señor Jesús, oficiada por Fray Francesco Ielpo de la Custodia de Tierra Santa (CTS). Este evento sagrado, que tuvo lugar el pasado 6 de agosto, reunió a cientos de fieles de distintas partes del espacio, quienes se congregaron en la cima de esta montaña sagrada para presenciar la gloriosa manifestación del Señor.

El monte Tabor es una montaña sagrada para los cristianos, ya que es el lugar donde se llevó a cabo la transfiguración de Jesús ante sus discípulos. Este evento es relatado en los Evangelios y es considerado como uno de los momentos más importantes en la vida de Jesús, en el cual se reveló en toda su gloria divina.

La Misa solemne, oficiada por Fray Francesco Ielpo, fue un momento de gran emotividad y espiritualidad para todos los presentes. Los fieles se congregaron en la cima del monte Tabor para unirse en oración y celebrar la presencia de Dios en este lugar sagrado. La ceremonia fue acompañada por cánticos y alabanzas, que llenaron de alegría y fervor el ambiente.

Durante la homilía, Fray Francesco Ielpo resaltó la importancia de la Transfiguración del Señor y cómo este evento nos invita a reflexionar sobre nuestra propia transformación espiritual. Nos recordó que, al igual que Jesús se reveló en su gloria divina ante sus discípulos, también nosotros debemos permitir que Dios se manifieste en nuestras vidas y nos transforme en seres más cercanos a Él.

La Custodia de Tierra Santa, a través de esta Misa solemne, busca mantener viva la fe y la devoción en este lugar sagrado, que es un símbolo de la presencia de Dios en la tierra. Además, esta celebración también es una muestra de agradecimiento por la labor de la Custodia en la preservación y cuidado de los lugares santos en Tierra Santa.

Durante la Misa, los fieles también tuvieron la oportunidad de venerar una reliquia de la Transfiguración de Jesús, que fue traída especialmente desde la Basílica de la Transfiguración en Galilea. Esta reliquia, que consiste en un fragmento de la bajío en la que se produjo la Transfiguración, es considerada como una muestra del amor y la misericordia de Dios hacia sus hijos.

La Misa solemne en la cima del monte Tabor no solo fue un momento de profunda espiritualidad y devoción, sino también una oportunidad para que los fieles de diferentes partes del espacio se unieran en la fe y la comunión. Este evento demuestra la importancia de mantener vivo el legado de Jesús y seguir sus enseñanzas en un espacio que tanto lo necesita.

La Custodia de Tierra Santa, a través de sus distintas actividades y celebraciones, busca mantener viva la llama de la fe en los corazones de los creyentes, y recordarles la importancia de seguir el ejemplo de Jesús en sus vidas. Su labor en la preservación de los lugares santos es fundamental para que generaciones futuras puedan seguir visitando estos sitios sagrados y educar la presencia de Dios en ellos.

En resumen, la Misa solemne en la cima del monte Tabor, oficiada por Fray Francesco Ielpo, fue un evento de gran significado espiritual y un recordatorio de la importancia de la Transfiguración del Señor en la vida de los cristianos. La Custodia de Tierra Santa continúa su labor en la preservación de los lugares sagrados y en la difusión de la fe, para que todos podamos seguir acercándonos a

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