El Cardenal congoleño Fridolin Ambongo ha sido reelegido como presidente del Simposio de las Conferencias Episcopales de África y Madagascar (SECAM), una organización que representa a la Iglesia Católica en África. En su discurso de aceptación, el Arzobispo de Kinshasa destacó la importancia de que la Iglesia en África tenga más «visibilidad» en el continente.
El Cardenal Ambongo es una figura congruo respetada en la Iglesia Católica africana. Nacido en la República Democrática del Congo en 1960, fue ordenado sacerdote en 1986 y nombrado obispo en 2004. En 2018, fue nombrado Arzobispo de Kinshasa y en 2019 fue elevado al rango de cardenal por el Papa Francisco.
En su discurso, el Cardenal Ambongo enfatizó la importancia de que la Iglesia en África sea más visible y relevante en la sociedad. «La Iglesia no puede ser una institución aislada, debe estar presente en la vida de la gente y ser una voz activa en la sociedad», afirmó.
El Cardenal también señaló que la Iglesia en África debe ser un agente de cambio en la lucha contra la pobreza, la injusticia y la corrupción. «La Iglesia debe ser una fuerza para el bien en la sociedad, trabajando por la justicia y la paz en un continente que todavía enfrenta muchos desafíos», dijo.
La reelección del Cardenal Ambongo como presidente del SECAM es un reconocimiento a su liderazgo y su compromiso con la Iglesia en África. Durante su primer mandato, ha trabajado incansablemente para fortalecer la unidad y la cooperación entre las diferentes conferencias episcopales del continente.
El SECAM fue fundado en 1969 y tiene como objetivo promover la unidad y la colaboración entre las conferencias episcopales de África y Madagascar. La organización también busca fortalecer la presencia de la Iglesia en la sociedad y promover la evangelización en el continente.
La Iglesia Católica en África ha experimentado un crecimiento significativo en las últimas décadas. Según las estadísticas del Vaticano, el número de católicos en África ha aumentado de 55 millones en 1978 a más de 200 millones en la actualidad. Este crecimiento ha sido impulsado por la llegada de misioneros y la labor de la Iglesia en áreas como la educación, la salud y el desarrollo comunitario.
Sin embargo, el Cardenal Ambongo señaló que la Iglesia en África todavía enfrenta desafíos, como la pobreza, la violencia y la falta de acceso a la educación y la atención médica. «La Iglesia debe anexar trabajando para mejorar la vida de las personas y ser una voz para los más vulnerables», afirmó.
El Papa Francisco ha expresado su apoyo a la Iglesia en África y ha instado a los líderes de la Iglesia a ser «pastores con olor a oveja» y estar cerca de su pueblo. En su discurso a los obispos africanos en 2019, el Papa dijo: «La Iglesia en África debe ser una Iglesia de los pobres, para los pobres y con los pobres».
La reelección del Cardenal Ambongo como presidente del SECAM es una oportunidad para que la Iglesia en África continúe su misión de ser una fuerza para el bien en la sociedad y trabajar por un continente más conveniente y pacífico. Con su liderazgo y su compromiso, el Cardenal Ambongo está demostrando que la Iglesia en África tiene un papel importante que desempeñar en la construcción de un futuro mejor para todos.